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Muchos fumadores se han pasado al tabaco de liar por ser menos nocivo y más económico que el de producción industrial. La pitillera es una forma cómoda y elegante para llevar el tabaco y se ha convertido en un accesorio muy funcional gracias a la ventajas que ofrece, entre las que destacan:

  • Estilo personalizado: es posible encontrar una gran variedad de modelos que se adaptan a los gustos y personalidad. Muchos modelos vienen forrados totalmente y están cocidos a mano, ya que se fabrican artesanalmente para lograr un mayor nivel detalle. Además, se adaptan al tamaño del paquete de tabaco.
  • Transporte óptimo: el tabaco prensado es difícil de llevar. También se acompaña de los tubos o el papel, la máquina de entubar, los filtros y el mechero. Las pitilleras eliminan este problema, ya que están diseñadas para llevar cómodamente todo lo necesario para poder preparar un cigarrillo en cualquier momento y lugar.
  • Son herméticas. Esta una gran ventaja, ya que permite transportar el tabaco suelto o los cigarrillos ya preparados, sin que nada se disperse en el bolso, cartera o bolsillo de la chaqueta. Además, el tabaco se conserva en perfecto estado.
  • Comodidad y ligereza: su forma rectangular que sea fácil de guardar en el bolso o cartera. Es un accesorio muy ligero, fabricado en materiales de muy alta calidad y gran belleza. Hay una gran variedad de modelos que se adaptan a los gustos y necesidades de cada persona.
  • No afecta a la calidad del tabaco: gracias a su cierre hermético el tabaco guardado en el interior de la pitillera conserva su aroma, sabor y humedad durante mucho más tiempo;, para ello las pitilleras cuentan con una junta tórica. Además, la pitillera dispone de un compartimiento propio para llevar los filtros y que mantengan intactas sus condiciones.

 

 

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