Seguro has visto a alguien fumando un cigarrillo electrónico, esos que vemos como cigarrillos de plástico y que también son conocidos como ecig. Generalmente se usan para dejar de fumar, mediante la reducción gradual de nicotina.
¿Cómo funcionan los cigarrillos electrónicos?
Si bien es muy parecido al cigarro tradicional, su funcionamiento es diferente. Dispone de un sistema con una batería recargable, un vaporizador y un cartucho que contiene bajas dosis de nicotina liquida.
- Este sistema calienta la solución liquida y la convierte en vapor inhalable;
- No producen nada de fuego, cenizas, combustión o malos olores, como pasa con el tabaco.
La nicotina liquida se libera para que las personas lo inhalen. En algunos modelos, la inhalación de la nicotina se puede realizar directamente desde el filtro. En otros sistemas, se puede usar el interruptor manual para activar el vaporizador interno.
La alternativa
El cigarrillo electrónico es una de las opciones más saludables al cigarrillo de tabaco, pues ha ayudado a fumadores a reducir y controlar los efectos secundarios como la tos, el sentido del gusto, y a mejorar el olfato o la fatiga al practicar algún deporte o actividad física.
En definitiva, el uso del cigarrillo electrónico es una de las opciones terapéuticas para el tratamiento de la adicción al cigarrillo y sus efectos sobre el sistema respiratorio y la salud en general.
Por este motivo, cada día son más las personas que usan este producto, pues la finalidad es que con el tiempo, dejen de fumar.
